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¿Es la Biblia más que un buen libro?

¿Es la Biblia más que un buen libro?

La Biblia se completó hace unos dos mil años, y aunque se han escrito innumerables libros desde entonces, no hay ninguno que la iguale. Piense en los siguientes aspectos.

  • La Biblia ha sobrevivido a multitud de ataques de gente poderosa. Por ejemplo, durante la Edad Media, en algunas naciones cristianas se consideraba que “el mero hecho de leer obras peligrosas o no autorizadas, especialmente si se trataba de la Biblia en lenguas vernáculas, era un acto de herejía” (El mundo de la renovación católica, 1540-1770). Muchos arriesgaron su vida al traducir la Biblia o promover su estudio. De hecho, algunos fueron ejecutados por eso.

  • Pese a sus enemigos, la Biblia llegó a ser, y sigue siendo, el libro más difundido de la historia. Se calcula que se han impreso unos 5.000 millones de ejemplares de la Biblia, completa o en parte, en más de 2.800 idiomas. En esto se diferencia muchísimo de los libros de filosofía, ciencia y campos similares, que tienen una tirada limitada y que al poco tiempo quedan desfasados.

  • La Biblia ha ayudado a conservar y desarrollar algunos de los idiomas a los que se ha vertido. La traducción al alemán de Martín Lutero tuvo una enorme influencia en ese idioma. La primera edición de la Biblia King James Version se considera “probablemente el libro más influyente que jamás se haya publicado” en la lengua inglesa. Del mismo modo, la traducción de la Biblia ha tenido enorme influencia en el idioma español y también en lenguas indígenas de Latinoamérica.

  • “En la historia de la cultura de Occidente, la Biblia ha ejercido una influencia sin [igual]. Toda la sociedad occidental, su cultura, su arte, su literatura, su lenguaje, etc., están impregnados de pensamientos y de imágenes bíblicas” (Gran Enciclopedia Universal).

No hay duda de que la Biblia es un libro único. Pero ¿qué la hace tan especial? ¿Por qué hubo personas que dieron hasta la vida por ella? Aunque hay muchas razones, veremos tres. Primero, la Biblia ofrece guía moral y espiritual, lo que prueba su extraordinaria sabiduría. Segundo, explica por qué hay guerras y sufrimiento. Y tercero, nos da esperanza, pues promete que los problemas desaparecerán y hasta explica cómo ocurrirá eso.

La Biblia ofrece guía moral y espiritual

No hay duda de que tener una buena educación es importante. Sin embargo, la educación académica no garantiza que la persona tenga inteligencia moral, como reconoció un artículo editorial del periódico canadiense Ottawa Citizen. De hecho, personas con títulos universitarios —como directivos de empresas o altos funcionarios públicos— engañan, estafan y roban. Según indica un estudio de Edelman —una agencia de relaciones públicas—, esto resulta en “una alarmante caída de la confianza” a nivel mundial.

La Biblia se concentra en la educación moral y espiritual. Nos ayuda a entender “lo que es la justicia, la honestidad y la igualdad, y todo buen camino” (Proverbios 2:9, La Palabra de Dios para Todos, PDT). Eso le ocurrió a un hombre a quien llamaremos Stephen. Estando preso en Polonia con 23 años, empezó a estudiar la Biblia y vio su valor práctico. “Ahora entiendo lo que significa ‘honra a tu padre y a tu madre’ —escribió—. También he aprendido a controlar mis emociones, en especial mi carácter violento” (Efesios 4:31; 6:2).

Unas palabras de la Biblia que Stephen se tomó en serio son las de Proverbios 19:11, donde dice que un hombre inteligente domina su enojo, “y es hermosura de su parte pasar por alto la transgresión”. Ahora, cuando se siente provocado, trata de calmarse y de seguir los consejos de la Biblia. “He hallado el mejor manual para la vida”, afirma Stephen.

A María, que es testigo de Jehová, la insultó en la calle una mujer que estaba en contra de los Testigos, provocando un gran alboroto. En vez de reaccionar mal, María siguió su camino tranquilamente. La otra mujer se avergonzó por su comportamiento y decidió buscar a los Testigos. Un mes después, encontró a María, la abrazó y se disculpó. Se había dado cuenta de que la bondad y serenidad de María se debían a su religión. ¿Cómo acabó la historia? Aquella mujer y cinco miembros de su familia decidieron estudiar la Biblia con los testigos de Jehová.

Jesús dijo que la sabiduría se demuestra por los resultados que produce (Mateo 11:19). Precisamente, los resultados demuestran que los consejos de la Biblia funcionan y sacan lo mejor de nosotros. Hacen “sabio al inexperto”, hacen “regocijar el corazón” y hacen “brillar los ojos” con una clara visión moral y espiritual (Salmo 19:7, 8).

La Biblia explica por qué hay guerras y sufrimiento

Cuando se estudia una epidemia, los investigadores tratan de averiguar qué desencadenó el brote. Lo mismo ocurre para comprender la “epidemia” de las guerras y el sufrimiento humano. En esto la Biblia también nos ofrece una ayuda inestimable, pues registra el comienzo de la historia humana, el momento en que empezaron nuestros problemas.

El libro de Génesis muestra que el sufrimiento empezó con la rebelión de los primeros humanos contra Dios. Entre otras cosas, quisieron decidir por ellos mismos lo que estaba bien y lo que estaba mal; un derecho que solo le corresponde al Creador (Génesis 3:1-7). Desde entonces, la mayoría de la gente ha mostrado la misma actitud. Como resultado, la historia ha estado plagada de guerras, opresión y conflictos morales y religiosos, y no de libertad y felicidad (Eclesiastés 8:9). Con acierto, la Biblia dice que al hombre “no le pertenece su camino” (Jeremías 10:23). Pero no está todo perdido. La buena noticia es que la rebelión humana está a punto de acabar.

La Biblia da esperanza

La Biblia asegura que, movido por su amor hacia quienes respetan su autoridad y sus leyes, Dios no permitirá que la maldad y el sufrimiento duren para siempre. Los malvados “sufrirán las consecuencias de su conducta” (Proverbios 1:30, 31, Dios habla hoy). Por otra parte, “los mansos mismos poseerán la tierra, y verdaderamente hallarán su deleite exquisito en la abundancia de paz” (Salmo 37:11).

La voluntad de Dios es que “hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad” (1 Timoteo 2:3, 4).

Dios convertirá la Tierra en un lugar pacífico y lo hará mediante su Reino (Lucas 4:43). Este Reino es un gobierno mundial con el que Dios ejercerá su legítima soberanía sobre la humanidad. Jesús relacionó el Reino con la Tierra cuando en el padrenuestro dijo: “Venga tu reino. Efectúese tu voluntad [...] sobre la tierra” (Mateo 6:10).

Los súbditos del Reino harán la voluntad de su Creador y reconocerán que es él —y no algún ser humano— quien merece gobernar. La corrupción, la codicia, las desigualdades sociales, el racismo y las guerras desaparecerán. Existirá, literalmente, un solo mundo, un solo gobierno y un solo conjunto de leyes morales y espirituales (Revelación [Apocalipsis] 11:15).

Por lo tanto, la educación es clave para que podamos ver ese nuevo mundo. La voluntad de Dios es que “hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad” (1 Timoteo 2:3, 4). Esa verdad incluye lo que podríamos llamar la Constitución del Reino: las leyes y los principios por los que se regirá. Algunos ejemplos se encuentran en el Sermón del Monte, en los capítulos 5 a 7 del Evangelio de Mateo. Lo animamos a leer esos tres capítulos y a imaginarse cómo será la vida cuando todo el mundo ponga en práctica esos consejos.

¿Debería sorprendernos, entonces, que la Biblia sea el libro más conocido del mundo? Claro que no. Se nota que sus enseñanzas han sido inspiradas por Dios. Y el hecho de que sea un libro tan difundido demuestra que Dios quiere que personas de cualquier idioma o nación lo conozcan y puedan disfrutar de todo lo que su Reino traerá (Hechos 10:34, 35).